Religion & Spirituality
Servir al señor cuesta, tiene costo, tiene un precio. Cuando un atleta quiere ser el mejor, debe sacrificarse y el costo es consagrarse con el deporte. En la vida cristiana cuando una persona se consagra va a recibir críticas, pero pasado un tiempo se ven los frutos de dicha consagración. La consagración es una decisión personal.